30.7.25

Electrón jubilado

En el Bosque Imaginado, un anciano electrón decide retirarse de su órbita habitual. Está cansado de girar alrededor del mismo núcleo, siguiendo las rígidas reglas de la física clásica. Con sus canas cuánticas brillando, anuncia: 

Olrait, basta. Ahora me muevo por vibras"

Nuevas normas

1. Superposición de hobbies 

- Puede estar simultáneamente tejiendo bufandas de fotones y leyendo poesía a los quarks.
- Su spin ya no es ↑ o ↓, sino como le apetezca (a veces en zigzag, a veces en forma de siesta).

Imagen: Grok

2. Tunelamiento recreativo

— Salta a órbitas sin pedir permiso, dejando mensajes como Visitado por e-jubilado en las capas de valencia.
— A veces se cuela en átomos vecinos solo para probar su café cuántico. 

3. Memoria probabilística

— Olvida donde está, pero encuentra mejores lugares.
— Sus recuerdos son como nubes de Schrödinger: ¿He estado en esa órbita? ¿O solo lo he soñado? 

Efecto en el átomo

— El núcleo protesta, pero el electrón le envía un certificado de energía cinética acumulada y lo calla.
— Los protones empiezan a envidiar su libertad y organizan un laboratorio. 

Legado

Ahora, cuando los electrones jóvenes se estresan, el anciano les susurra:
Ionízate, hijo mío. La jubilación es solo otro estado cuántico.

Y sigue vagando, brillando cuando le da la gana, convirtiendo el caos en arte abstracto subatómico

Olrait: código de honor del electrón que ya cumplió su función... y ahora juega con ella.

IA: DeepSeek 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Guarda la netiqueta al comentar